jueves, 21 de marzo de 2013

Foto comentada: Cordyceps



Datos toma

Perú  2010. RAW. 105 mm macro. Enfoque Manual. Prioridad Abertura. ISO 400. f/6,3. 1/2 seg. WB día. Medición matricial. Flash.  Trípode. Cable disparador. Revelada en Lightroom. Click para ampliar.

Condiciones y técnica. 

Se trata de un hongo del género Cordyceps fotografiado en la amazonia peruana, en particular en el parque nacional de Tambopata. Muchos hongos del género Cordyceps son parásitos de insectos. Algunos, incluso poseen la habilidad de modificar la conducta de sus hospedadores mientras estos aún están vivos. En esa fase, el micelio del parásito vive en el interior del huésped y su presencia no es perceptible, pero invade el sistema nervioso del huésped y le  obliga a adoptar posiciones y emplazamientos óptimos para la liberación de las esporas. Una vez esto ha sucedido, el parásito mata al huésped y emerge entre las uniones del exoesqueleto del insecto en este bonito espectáculo en que vida y muerte se dan cita.  Por si a algún amante de la ciencia ficción le suena a algo, en la película “alien” la capacidad de alien de “parasitar” humanos en su ciclo inicial de vida está inspirada en estos hongos.

Fotográficamente hablando, la foto contaba con diversas complicaciones, las típicas que se dan en macrofotografía. En primer lugar, la composición que veis es pequeña, entre 1 y 1,5 cm para el insecto. Para abordar la fotografía se utilizó un objetivo macro, que tienen la característica de tener una distancia de enfoque muy pequeña permitiendo grandes ratios o ampliaciones. En fotografía macro, la profundidad de campo es muy escasa. Por ello, se buscó una composición en que los elementos de la imagen estuviesen aproximadamente paralelos al plano focal, para lograr tenerlos a foco, ya que de otra forma no era posible. Se utilizó el flash, subordinado a la luz ambiental, para rellenar sombras y homogeneizar la iluminación en la escena, combinándola con la luz ambiental, filtrada por las copas de los árboles de forma agradable en la composición. Se eligió una abertura de 6,3 un iso 400 y una velocidad de ½ de segundo. Todos estos valores responden a la búsqueda de un equilibrio entre ganar profundidad de campo (cerrando el diafragma) pero intentando mantener una cierta velocidad ya que, de vez en cuando, pequeñas rachas de aire movían la hoja en que sucedía la escena (de ahí el elegir un iso superior al básico). Otra forma de abordar la situación hubiese sido iluminando la escena por completo con uno o más flashes. Esta opción independiza la velocidad del resto de parámetros, pudiendo bajar la iso y cerrar más el diafragma sin sacrificar la velocidad, al controlar la luz aportada por los flashes.  En este caso, quise aprovechar la luz ambiental y viendo que podía lograr la foto sin grandes perjuicios, opté por hacerlo en vez de usar la luz del flash de forma principal. Otro pequeño truco, para poder usar isos bajas y diafragmas cerrados sin sufrir por la velocidad es usar pinzas o elementos que te permitan soportar la hoja, de forma que el viento no le afecte. En este caso, yo no disponía de nada semejante. 

Finalmente, como veréis en la siguiente foto, se eliminaron elementos del fondo, como hojas y ramas caídas, que distraían la atención y que no ofrecían un fondo conveniente, aun estando desenfocados. Un buen fondo es vital para una buena fotografía. 


Composición:

La composición es sencilla y está basada en el color y en la forma. El verde intenso de la imagen en contraste con el naranja del hongo crean un efecto de contraste interesante. Además lo sorprendente y curioso de la escena despierta interés en el espectador, que trata de averiguar que sucede en esta composición de hongo e insecto. Finalmente, la imagen tiene unas proporciones muy cuidadas que responden a la conocida como serie de Fibonacci, también llamada número de oro o proporción áurea. De esta proporción, de la que se puede encontrar gran cantidad de información en la red, se puede extraer una espiral de proporciones áurea. Esta espiral, se encuentra muy presente en la naturaleza, ya que su forma es óptima para muchos procesos naturales. Del mismo modo, las relaciones áureas llevan siglos usándose en pintura, escultura y arquitectura. Todo ello hace que cuando una imagen esconde relaciones áureas, pronto sea agradable a la vista dada la naturalidad y la frecuencia con las que estamos acostumbrados a ver dichas proporciones en el mundo natural y en el arte desde que somos pequeños. Así, una imagen con proporciones áureas enseguida parece compensada y armónica. 


3 comentarios:

  1. Resulta molt didàctic que també hagis pujat la foto amb un fons que "ni fu ni fa" perquè així ens adonem de la importància de triar un bon fons. Genial!!!

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    1. Gràcies, m'alegro molt que us sembli didàctica la entrada! Una abraçada!

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